Of the story.
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La cosa es que llegué a mi casa, adolorida y con una mezcla de risa y llanto... chis-tonta la weá.
Mi hermano estaba solo, almorzamos los 3 y empezamos a ver qué haríamos en la noche.
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Un carrete.
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Yo no soy muy buena para prestar la casa, me preocupo demasiado, tal como lo comenté una vez antes, cuando escribí sobre mi hermano, yo siempre soy la hermana mayor, la responsable, la preocupada... la latera.
Pero filo. Concluimos que todos asumiríamos al día siguiente.
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La cosa estuvo buena... vino harta gente, más amigos de mi hermano que míos, pero bien igual. Me relajé, a pesar de ver cómo las colillas de cigarro invadían todo, los vasos y las botellas por todas partes y las huellas de la gente marcadas en el piso.
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Domingo, 12:30 am:
"Chucha! van a llegar mis viejos! a levantaaarse! a ordenaaaar!!"
Menos mal que la Pau estaba con nosotros. Empezamos a ordenar, y como siempre mi hermano sacó una excusa y dijo: ahh! se me olvidó que me pidieron que le fuera a dar comida al perro de Max! (mi tío) voy y vuelvo, no me demoro nada!
Yo con la cara de 3 metros, le alegué un rato pero finalmente accedí y no presté demasiada importancia a la frase: voy en la moto del papá, para ir más rápido.
Julián no tiene licencia de moto. Pero es una motoneta, hasta yo he manejado una motoneta, de estas tipo scooter. Pasó el rato, y nos dieron la una y las dos... (8) y Yuli no llegaba. Pensé en preocuparme, pero no lo hice.
Cuando de repente, siento la moto... "por fin llegó este gil, vamos a almorzar"
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Y cuál no fue mi cara de asombro-sorpresa-angustia-deformidad cuando lo veo entrar cojeando, sangrando, con heridas en la cara y los ojos llorosos.
QUÉ MIERDA!!???
Sí. Efectivamente se había sacado la cresta en moto.
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Me angustié, el pobre no se podía ni mover... más pena me dio cuando, entre quejidos de dolor nos contó el episodio y cómo tuvo que venirse manejando de vuelta!!!
Piensa friamente, Natalia. Qué hago ahora? mis papás no están, no sé si tiene una costilla rota o qué tiene por dentro... apenas se puede mover y lo que más me extraña: llora.
La Pau le cura las heridas... qué mierda hago yo?
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Siempre para estas cosas las mamás son más alarmistas, asi que decidí llamar a mi papá. por un segundo pensé en cómo decirle lo que había pasado para no asustarlo más de la cuenta, pero en cuanto me dijo alo, vomité: papá!! Julian!! accidente!!! moto!!!
Para hacerla corta, mi papá muy calmado me dijo lo que tenía que hacer, llamé por teléfono a urgencias, y afortunadamente un vecino amigo se ofreció a llevarnos en su auto, partimos a la clínica y mi papá me dijo que estaban almorzando, y que se vendrían cuanto antes. A mi mamá no le dijimos nada...
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Llegamos a la clínica, y nos hicieron esperar mucho...
"tome asiento, les vamos a avisar en cuanto se desocu...."
"no puedo tomar asiento, me atropelló una vaca, gracias."
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Yulz al menos hablaba, lo atendieron y salió cubierto de bendajes y cosas raras afortunadamente sin nada demasiado grave...y me pegaron el palo.
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"Son 130 mil"
...después la isapre reembolzaría pero... 130 LUCAS!? así, de una?
bueh.. menos mal que Natita fue precavida y llevó parte de sus ahorros en el bolsillo y pudo pagar.
Nos fuimos a la casa, y de a poco todo parecía volver a la "normalidad"... Llegó mi papá, y luego de ver a mi hermano, le muestro mi moretón y casi se cae de espalda... ja!
"acaso tú ibas con él"?
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Y bueno, después too el speech de porqué había ido en moto si no tiene licencia y blabla, que me lo voy a ahorrar porque quiero terminar el relato y no sé cómo.
La cosa es que fue un fin de semana DE LOCOS. Entrete para contarlo, pero estresante para vivirlo.
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Alguna anécdota que les vino a la mente? pueden comentarla ;)
Saludos
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N.
12 comentarios:
wena naty!
Una vez escribí algo en mi blog q se llamaba: Fin de semana de locos
jaja pero no me acuerdo que cosas conté.
En realidad me han pasado varias cosas, como la noche que carretié con el travesti (no, no el viernes pasado, eran todos bien machitos jaja) otro en que choqué, mi primera ida a un show mixto en cuarto medio con mis compañeras :S, la vez q sergio lagos tocó en una disco y se tiró como a cinco minas d un viaje y yo camufladamente le saqué fotos...(no, no era una de las cinco chicas). Y otras noches más freak que no relataré mejor.
Besos nat y una lástima la caida de tu hermano, es simpático! pero nica me subo con el a una moto ;) ok.
jaja
bye!
A mí una vez me pasó algo similar, el año 2002, con una cuatrimoto (de esas que por lo general se usan en las playas y/o dunas). Resulta que mi cuñado (Q.E.P.D.) llegó con su chiche nuevo a mi casa y me dice: "vamos a probarla". Partimos y fuimos a las dunas de Ritoque. Cuando me la pasó, aceleré al máximo e iba happy, hasta que de repente la zapatilla del pie derecho se me quedo atascada... intenté sacar el pie, pero no podía. Ante la desesperación, en vez de frenar con los frenos (valga la redundancia), atiné a detener la marcha con la pierna izquierda... ¿Resultado? La moto siguió de largo mientras yo caí en una contorsión casi de acróbata al suelo, torciéndome la pierna derecha. Había pensado que tenía una fractura, porque no sentía los dedos del pie... gritaba de dolor ante el hecho, pero pude irme cojeando hacia la camioneta.
Raudamente, acudimos al hospital de Quintero, donde me pusieron la bota de yeso más ordinaria que se haya hecho en la historia. Al salir, el tipo de la recepción me dice: "¿su sistema de salud?" Apenas mencioné la palabra isapre, me dice, muy campante: "son 50 lucas!!!" Chuuuuucha. Mi cuñado pagó y nos fuimos. Al llegar a la casa, no pasaron 2 horas y la bota ya se había roto. Final, la isapre reembolsó el 50% y acudí a un traumatólogo a una clínica, donde me hicieron una bota decente, anduve con muletas 2 semanas e hice uso del seguro de la universidad (que fresco, ¿no?... ojo, no es mala idea), ya que aduje que me había accidentado camino a clases. El doctor llenó la ficha, la presenté en la compañía y me reembolsaron la misma cantidad que había gastado en el hospital... a la larga salí ganando, jejeje.
Disculpa si me extendí demasiado, apelando a mi género cantinflesco para contar anécdotas. Es que me sentí muy identificado con lo que le pasó a tu hermano, y ¡ojo! te di una idea al respecto. Si tu hermano está en la U, puedes hacer uso del seguro, total, en el fondo no cagas a nadie. Me avisas si quieres inquirir más detalles al respecto.
Un gran abrazo y te felicito por la pachorra de tener que aguantar tanta lesera en la semana (además de leer tan laaarga y aburrida historia de mi persona).
Atte.
Don Clavito
Cualquiera de mis historias no supera ni por si acaso a la tuya. Una vez me subí a una moto, me quedo el pie atrapado, pero lo sacaron a la fuerza y desde ahí que no me subo nuca más a uno. Yo era niña cuando pasó eso. Después me ahogué comiéndome un dulce Ambrosoli. Me dijeron que estaba azul... una tía me lo sacó. Nada ha sido tan terrible después de eso... saludos.
jaajja ta buena la historia, oye pero 130 lucas, me cagooo, q rabia, en fin
nada muchos saludos y cuidado con las vacas chocadoras jijij
Una vez me quedé con mis hermanos mientras mis padres feron argentina por unos días. Jojo... hasta hoy nos miramos y no reimos.
Ahora que ya somos adultos les contamos a nuestros padres todo lo que hicimos esos días y no les queda otra que reirse.
Lamentablemente no me puedo explayar sobre los hechos porque mis hermanos se podrían enojar. No les gusta eso de andar exhibiendo la vida por internet.
Me acuerdo de un amigo que se quedó un mes solo cuando estábamos en cuarto y medio y el primer día chocó el auto (sin licencia).
Entre partes y cosas raras se gastó toda la plata que le dejaron los viejos, así que todos teníamos que turnarnos para que almorzara en nuestras casas.
El guatón chanta se repetía los platos, pedía postres... Mejor hacíamos una cucha nosotros y le pagábamos los partes.
Guena,guena la historia...pero la cago lo caro que son las clinicas...mis viejos ya han gastado un dineral (no pienses que soy enfermizo jajaj). Cada consulta cuesta 40 lucas y estai menos de 5 min adentro con el doc...
De hecho una vez jugando futbol por la universidad tranque con un defenza y me esguince el pie. Cuando llegue a la clinica, me tomaron la presion, me dijeron una par de cosas nada que ver (como lo azul que estaba el cielo ese dia...) y me cobraron 75 lucas como si nada...lo encontre ultimoooo...y de hecho no me hicieron nada en el pie...solo tenia que "tratar" de no moverlo.
Oye...pero me hubiera gustado ver la cara de la secretaria que te atendio ese dia cuando le dijiste: "no puedo tomar asiento, me atropelló una vaca, gracias." jajaja
saludos...gera ;)
aaaaaaaaaaah!!!!!!!!!!
les había contestado a todos y se borró!!!
y siempre lo copio!! pero la ley de murphy.
Filo, se quedaron sin respuestas no más, me piqué.
N.
Juaaaaas Natalia!
Tienes más historias que Arjona, jajjaja!
Besos de chocolate!
Simplemente te voy a decir, Natalia, que me maté de la risa leyendo esta historia. Saludos
Que increible, pero chitoso...pobre vaca...jajajaja
Mucho abrazos....me reí bastante.
Desde que me prestaron la casa para mi fiesta de 18 años y quedó la mansaca (moraleja: nunca darle toda la organización a un primo)...siempre me preocupo de tener todo bajo control o, cuando menos, mirar que no esté pasando nada raro en eventos similares por acá. Así es que por eso me gustan más las charlas con café, picadillo y buena música de fondo...debe ser la edad, también.
Chuuu...o sea, con la sacada de cresta de Julián, lo que te pasó con la vaca voladora casi que se coló por el zapatito roto. Saludos cordiales.
P.D.: Me imagino la cara de circunstancia de la persona que te invitó a tomar asiento y tú le respondiste lo de la vaca, jajaja.
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